De acuerdo con Natalia Améstica, sintió coraje y desprecio después de que Canserbero le dijera que ya no quería trabajar con ella.
Este 26 de diciembre, Natalia Améstica, exmánager de Canserbero, confesó haber drogado y asesinado al rapero aquel 20 de enero de 2015. Y no solo a este, también a quien fue su esposo y amigo del artista, Carlos Molnar, en complicidad con su hermano.
A casi nueve años del fatal suceso que marcó a la comunidad del rap a nivel Latinoamérica, Natalia señaló que utilizó benzodiacepinas para adormecerlos a ambos y apuñalarlos hasta dejarlos sin vida.
Las primeras versiones sobre la muerte de Canserbero arrojaron que él había asesinado a su amigo Molnar y posteriormente se aventó de un décimo piso para suicidarse. Sin embargo, con la reapertura del caso en noviembre de este año y la confesión de Améstica, dicha teoría es completamente desechada.
Este martes, la mujer que fue mánager del rapero reveló que tomó la decisión de matar a Tirone José González Orama, mejor conocido como Canserbero, porque supuestamente no le dio reconocimiento en una gira que realizó previo a su asesinato y al querer cambiar de representante.
“Yo quería que me pagaran los pasajes que había comprado, más un porcentaje por haber hecho la organización de dicha gira. También se dio que Tirone nos expresó que no quería que lo manejara yo como mánager, aunque yo había hecho esa gira de Argentina y Chile y todos los demás trabajos de marketing que había trabajado para sus fechas”, dijo en su confesión.
Natalia dijo haberse sentido mal después de enterarse de que Canserbero ya no quería trabajar con ella ni supuestamente reconocer su trabajo.
“Eso me dolió mucho y quedé con mucho sufrimiento interno por el desprecio y que no fui considerada como mánager ni como organizadora de esta gira”, expresó.
En la declaración que hizo el 26 de diciembre, Natalia Améstica dijo que la noche anterior ella estaba haciendo la cena para los tres, pero a ellos les dio un té con Alprazolam, medicamento utilizado para el tratamiento de crisis de ansiedad, agorafobia, ataques de pánico y estrés intenso.
“El que me ve es Carlos, pero se preocupó mucho, estaba somnoliento. Le explicó que fue un ataque de ira y no me pude controlar, pero él cae en el sofá dormido y es cuando yo le doy dos puñaladas en su costado”, afirmó la mujer en su declaración.
Después mencionó que otras personas le ayudaron para terminar de matarlos y alterar la escena del crimen con el fin de hacer que pareciera un homicidio de Canserbero a su amigo y posterior suicidio del artista venezolano.