La manifestación de pobladores de La Resurrección estuvo marcada por una violenta gresca con policías municipales, así como el aseguramiento del presidente auxiliar y un funcionario municipal
Habitantes de la junta auxiliar de La Resurrección, inconformes por la clausura de al menos seis establecimientos, tomaron por más de ocho horas las instalaciones del Palacio Municipal de Puebla para exigir al gobierno de la ciudad que atienda y resuelva sus demandas, sin embargo, el encontronazo desató un violento enfrentamiento con la policía municipal.
Con pancartas en mano y bajo consignas como “¡No a la represión!” y “¡Apertura de nuestros negocios!”, la mañana del 21 de noviembre la comunidad indígena salió de su presidencia auxiliar a pie, en mototaxis y camiones de transporte público rumbo al ayuntamiento capitalino, con el fin de exigir la reapertura de sus talleres mecánicos, tiendas de autoservicio y un restaurante-bar, todos estos negocios clausurados por las autoridades.
Cierre de negocios en La Resurrección desata gresca en Palacio Municipal
Previo a la llegada de los quejosos un grupo de granaderos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana ya resguarda el inmueble con una valla humana.
Cerca de las 12:00 horas, el grupo de manifestantes arribó al primer cuadro de la ciudad para exponer que durante este fin de semana llegaron a inspeccionar sus lugares de trabajo y al cabo de unos minutos les clausuraron los negocios con el argumento que no contaban con las licencias de funcionamiento, cuestión que califican como “injusta” debido a que les impusieron multas que van de los 10 hasta 30 mil pesos.
Los habitantes solicitaron que se realizara una mesa de diálogo con las autoridades municipales y con el Consejo Indígena de La Resurrección, con la finalidad de entregarle un escrito en donde se exponían sus inconformidades, acusando la intención del Ayuntamiento de cobrar permisos por la operación de establecimientos, bajo el argumento de que se rigen por usos y costumbres.
Desde su llegada, los pobladores de la junta auxiliar advirtieron que ingresarían por la fuerza a Palacio de Gobierno en caso de no ser recibidos. Los más de cinco autobuses y 20 mototaxis en los que se trasladaron fueron colocados en los cruces de calles para cerrar la circulación.
Ante la negativa de las autoridades, amenazaron con tirar las puertas del Palacio Municipal de la capital con un tractor y con una motocicleta.
Cerca de las 15:00 horas, los manifestantes obligaron a las autoridades a replegarse y rompieron el cerco de seguridad que habían apostado para contener la protesta.
El grupo intentó derribar la puerta del Palacio de Gobierno debido a que no los recibían, al momento, los policías antimotines decidieron empujarlos para hacerlos retroceder, lo que marcó el inicio a la gresca.
Los policías respondieron a la agresión con golpes de toletes y escudos mientras los manifestantes les lanzaron las hebillas de sus cinturones, botellas de vidrio, piedras, palos; aventaron macetones recién colocados enfrente de Palacio y rompieron vidrios de las oficinas de turismo.
Detención de presidente auxiliar aviva furia de pobladores
La protesta se desató con mayor fuerza con la exigencia de liberación para el presidente auxiliar Adolfo Reyes Pérez López, quien se encontraba en el lugar y buscaba reunirse junto con una comisión, sin embargo, tras el alboroto fue trasladado a las instalaciones de Rancho Colorado.
Tras el enfrentamiento los pobladores decidieron guardar la calma, ahora con la exigencia de que les devolvieran el tractor con el que minutos antes pretendían entrar por la fuerza al Palacio Municipal; el vehículo fue resguardado por los granaderos de la SSC.
A esto se sumaron también consignas contra el presidente municipal: “Eduardo Rivera gobierna en contra de los pueblos indígenas”, “¡Vivan las comunidades indígenas!” y “Eduardo Rivera es la segunda vez que ganas y gobiernas en contra de los pueblos indígenas ¡Ya basta!”, fueron parte de los gritos, mientras pedían la liberación de su presidente auxiliar.
Después de unas horas, Israel Chávez, funcionario de la Secretaría de Gobernación municipal (Segom), intentó dialogar con los inconformes, sin embargo, al no tener una respuesta por parte de la autoridad se lo llevaron retenido.
Un grupo de mujeres jaló a funcionario del brazo y lo subieron a un microbús con placa de circulación 650-192S, que corresponde a la unidad 35 de la Ruta 17; tras más de cuatro horas detenido, fue liberado.
Durante la manifestación resultaron lesionados al menos tres pobladores, uno con golpes en la cabeza que le provocaron hematomas y salida de sangre; otro más con golpes en el cuerpo.
Ayuntamiento condenó “violenta” manifestación de pobladores
Por su parte, el Ayuntamiento capitalino condenó la manifestación a través de un escrito al calificarla como “violenta”, además de señalar que el actuar de los inconformes arriesgó a menores de edad.
Indicó también que por el hecho se detuvo a tres personas, además de insistir en que la regulación de establecimientos comerciales es una atribución del Ayuntamiento capitalino, según puede leerse:
“Ante los hechos suscitados la tarde de este martes frente a Palacio Municipal, generados por una manifestación violenta por parte de un grupo de pobladores de la junta auxiliar de la Resurrección, en protesta por el cierre de bares irregulares, el Ayuntamiento de Puebla señala que:
- El pasado miércoles 15 de noviembre, se realizó un operativo de clausura en un bar de la junta auxiliar La Resurrección por falta de documentos, atendiendo la colaboración de los tres órdenes de gobierno para mantener la zona del nororiente de la capital en orden, pues en dicho lugar hubo denuncias por venta prohibida de alcohol.
- El Ayuntamiento de Puebla no va a renunciar a su obligación de trabajar por la seguridad pública de toda la ciudadanía. Por ello, condena enérgicamente la actuación de los manifestantes, encabezados por representantes de la Junta Auxiliar, quienes reclamaban que no se realicen operativos por parte de la Dirección de Normatividad y Regulación Comercial a establecimientos que operen fuera del reglamento.
- Durante su movilización, retuvieron a un funcionario municipal, que fue liberado horas después; agredieron a medios de comunicación; lesionaron a policías municipales, dañaron el inmueble de Turismo Municipal ubicado junto a Palacio, rompieron macetones y amagaron con dañar la puerta de éste con un tractor, arriesgando a menores de edad que se encontraban presentes.
- Ante esta situación, fue necesaria la presencia de elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) para mantener el orden, y de la Secretaría de Gobernación Municipal para entablar el diálogo, así como de visitadores de Derechos Humanos para dar veracidad de los hechos.
- Derivado de estos hechos, y ante la probable comisión de diversos delitos, elementos de la SSC detuvieron a tres personas identificadas como Adrian «N», de 33 años de edad; Adolfo «N», de 56 años de edad; y Jehu «N» de 28 años de edad, quienes fueron puestos a disposición de las autoridades ministeriales.
- Por su parte, la Secretaría de Gobernación Municipal recibió a una comitiva de los manifestantes para entablar el diálogo y llegar a un acuerdo apegado a la legalidad.
- Cabe enfatizar que la regulación de bares, como todo establecimiento comercial, es una atribución del Ayuntamiento de Puebla, como lo marca la ley.
- La violencia jamás será el camino para resolver problemas. Exhortamos a los actores políticos a privilegiar la paz social y la legalidad, además de contribuir dentro de su responsabilidad a un ambiente de concordia”.