Andrés Manuel López Obrador garantizó a los trabajadores del Poder Judicial de la Federación que sus prestaciones y otros derechos laborales no serán afectados por la extinción de los fideicomisos de ese órgano de poder.

Andrés Manuel López Obrador garantizó a los trabajadores del Poder Judicial de la Federación que sus prestaciones y otros derechos laborales no serán afectados por la extinción de los fideicomisos de ese órgano de poder.

De acuerdo con el Poder Judicial y sus defensores, hasta 50,000 trabajadores sindicalizados estarían siendo perjudicados. El gobierno federal sostiene que este tipo de empleados no rebasa la cuota de 1,000 trabajadores.

El anuncio del presidente derivó de que cientos de trabajadores del Poder Judicial han realizado manifestaciones en distintas ciudades de la República contra la desaparición de 13 de 14 fideicomisos, para que el gobierno pueda redirigir 15,000 millones de pesos (820 millones de dólares) a programas sociales, principalmente del sur del país.

López Obrador dijo respetar y garantizar las libertades de manifestación de los trabajadores, pero no compartirlas, pues éstos están siendo “manipulados por los de arriba”.

Por ello aseguró que si algún trabajador será afectado por la iniciativa de extinguir los fideicomisos, será escuchado para restituirle sus derechos laborales y prestaciones.

«Si hay un trabajador que va a recibir menos de su salario, nosotros somos avales. Yo soy la garantía de que no se les va a tocar absolutamente nada de su sueldo o de sus prestaciones”, declaró López Obrador.

El presidente insistió en que los trabajadores no serán perjudicados, sino los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) quienes ganan hasta 700,000 pesos por mes, por los incentivos que calificó como “privilegios de la burocracia dorada”.

“Pienso que están ejerciendo su derecho a manifestarse, lo veo bien. Desde luego que no comparto su punto de vista, porque están siendo manipulados por los de arriba del Poder Judicial. El ajuste es arriba, es que los ministros, magistrados, jueces ganan mucho y viven colmados de atenciones”, insistió.

Vía: El economista

Por redaccion

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