Con una ceremonia tradicional de purificación y una ofrenda a la Madre Tierra, el pueblo náhuatl de Santa Cruz Huitziltepec, San Luis Tehuizola y Molcaxac inició con la construcción de su camino artesanal de concreto hidráulico –que comunica a otras comunidades de la Mixteca poblana–, gracias al apoyo del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI). “Estamos cumpliendo con un encargo del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien nos ha pedido escuchar a todos y atender a todos, pero que le demos una preferencia muy especial a los pueblos y comunidades indígenas, eso es lo que hoy estamos materializando”, afirmó el director general del INPI, Adelfo Regino Montes. Ante los integrantes del honorable Consejo de Ancianos, autoridades federales, estatales y municipales, señaló que estos caminos que iniciaron en Oaxaca en 2018, que se extendieron a la montaña de Guerrero, a los pueblos indígenas de Sonora, Nayarit, Durango y Jalisco, así como a los límites de Puebla con Hidalgo y la mixteca, tienen la misión de honrar nuestra historia, nuestra memoria y más profunda espiritualidad. La pavimentación de este camino real que fue usado por los ancestros de estos pueblos y comunidades, se hace gracias a la organización social comunitaria, con la decisión de sus asambleas y la mano de obra de las mujeres y hombres de la región; “no es como antes que llegaban las empresas, los gobiernos que dejaban obras inconclusas y de mala calidad”, refirió Adelfo Regino. Hay un cambio, dijo, muy radical y profundo, porque esta obra va a ser realizada por la gente de la comunidad, así como nuestros antepasados hicieron grandes construcciones, monumentos, pirámides, centros ceremoniales y caminos. Así, nosotros también podemos hacer nuestras obras comunitarias. “Ahora se están entregando los recursos de manera directa a los pueblos y comunidades indígenas, porque este gobierno los reconoce en los hechos –no en el discurso–, como sujetos de derecho público con capacidad para recibir y administrar su presupuesto; eso antes no se podía, eso antes era imposible, esto significa que ahora la comunidad tiene personalidad jurídica, derechos y obligaciones que ejerce a través de sus autoridades tradicionales, nombradas en la asamblea comunitaria”, recalcó. Precisó que el INPI ha expedido constancias de reconocimiento a las comunidades indígenas, con el objetivo de que puedan obtener su Registro Federal de Contribuyentes (RFC) ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT) y obtengan reconocimiento fiscal. Antes de este gobierno, manifestó, las comunidades indígenas no podían tener un RFC comunitario para tener su cuenta bancaria –con los retrasos y requisitos difíciles de cumplir en las instituciones bancarias privadas–, por lo que el Banco del Bienestar ha hecho más flexibles los trámites para poder depositarles los recursos públicos de manera directa, “eso es lo que hay detrás del programa de caminos artesanales”. Camino anhelado desde hace 70 años El Coordinador del Consejo de Ancianos de Santa Cruz Huitziltepec, Constantino Bravo López, reconoció que el presidente López Obrador es el primero en décadas que voltea los ojos a la Tierra del Colibrí, a la Casa del Colibrí. Al dar la bienvenida, recordó que pasaron 70 años de trámites para lograr el sueño de contar con este camino, que iniciará en una primera etapa con dos kilómetros gracias a la participación de las comunidades beneficiadas. Del mismo modo, Nereo Oropeza, también integrante del Consejo de Ancianos, narró que anteriormente por la región contaban con un tren que les permitía desplazarse para vender sus mercancías, pero las vías fueron levantadas. El sueño que tuvieron nuestros antepasados y la lucha que iniciaron; cuando hay interés, cuando hay intención y cuando hay necesidad, el espíritu de lucha siempre tiene un fruto y hoy en lo particular, los hemos conseguido, con el inicio de un proyecto que se quiso hacer desde hace mucho, refirió. En tanto Roberto Bolaños del Rosario, en representación del gobernador de Puebla, Sergio Salomón Céspedes Peregrina, destacó que en la región no se había tenido una buena carretera, que ahora les permitirá unir a sus comunidades con calidad y eficiencia por la ruta que usaron históricamente. A su vez el director general del Instituto Poblano de los Pueblos Indígenas (IPPI), Rafael Bringas Romero, tras dar el saludo en lengua náhuatl, explicó que este camino, el buen caminar, es seguir el consejo de los ancianos. “En este concepto del caminar, del camino, es hacerlo en comunidad, solamente así podremos ver materializadas este tipo de obras que debe quedar bien y pavimentada con concreto”, añadió. Recordó que en Tenango de Doria se hace otro camino para unir puebla con el estado de Hidalgo, gracias a la voluntad del presidente y el apoyo del INPI.
En un ambiente de fiesta y con el acompañamiento de la música de dos bandas tradicionales de las comunidades nahuas y mixtecas, inició formalmente la primera etapa de este camino con el compromiso de las autoridades de hacer bien las obras para poder seguir avanzando el próximo año.